Según diversas fuentes, el 65% de los ingresos que derivan de la explotación comercial de rodeos de cría depende de la producción de terneros por hectárea y por año. El restante depende de la venta de vacas de refugo, tanto gordas como conserva. Siendo los terneros los más significativos, para lograr buenos resultados debemos centrarnos en la eficiencia del sistema. Muchos de los errores están relacionados con la falta de la preñez, y en la mayoría de los casos, por una condición corporal deficiente. ¿Cómo se logra una condición corporal en bovinos y cuáles son las claves para medirla? En esta nota, lo descubriremos.
¿Qué es Condición Corporal?
La Condición Corporal (CC) en bovinos es una evaluación visual del grado de reserva de grasa que tiene un animal, principalmente en zonas como costillas, lomo, anca y base de la cola. Es una herramienta práctica y rápida para estimar el estado nutricional y el potencial reproductivo y productivo de los animales.
Al medirse en una escala que puede ser de 1 a 5 o de 1 a 9, se trata de una medición subjetiva que está ligada al entrenamiento del observador. No obstante, existen referencias que pueden ayudar a determinar un valor más empírico.

¿Para qué sirve la Condición Corporal en cría?
La Condición Corporal (CC) es una herramienta clave para evaluar el estado nutricional de las vacas de cría, especialmente en sistemas donde la base forrajera es limitada en calidad y cantidad, como en los pastizales naturales.
Su utilidad principal está en que permite anticipar el rendimiento reproductivo de los vientres. Las vacas con buena condición corporal al parto retoman antes la actividad ovárica, ovulan más rápido y se preñan con mayor facilidad. Por el contrario, una vaca que pierde entre peso puede retrasar su ovulación, afectando negativamente los porcentajes de preñez.
Además, la CC ayuda a tomar decisiones de manejo como:
- Ajustar la oferta forrajera o suplementar.
- Estimar las reservas energéticas necesarias para cada etapa del ciclo reproductivo.
- Determinar cuántos kilos necesita ganar o puede perder una vaca para mantenerse dentro de un rango reproductivo óptimo.
Se estima que cada punto de CC equivale a unos 43 kg de grasa corporal, lo cual da una idea del impacto real de una baja o mejora en el estado del animal.
No obstante, también debemos considerar el tamaño de los animales a la hora de interpretar la condición corporal. Por ejemplo, en vacas de 600 kg de peso, la pérdida de 25 kg equivale a 0,5 puntos de CC, mientras que en vacas de menor tamaño la pérdida puede significar un punto completo.

¿En qué momentos medir Condición Corporal?
Existen momentos clave en los que recomendamos medir concidión corporal, entre los cuales se encuentran:
- Comienzo de parición: La vaca debe tener una Condición Corporal de no menos de 2,7 para que su intervalo parto-1er celo no se prolongue más allá de los 60 o 70 días (Stahringer y otros, 2003)
- Inicio del servicio: Por debajo de una condición de 2,4 se reducen de forma muy manifiesta los valores de preñez, en tanto que 2,4 y 2,6 parecerían constituir un valor umbral. En esta etapa, un valor deseable rondaría entre 2,8 y 3.
- Diagnóstico de preñez: En el momento del tacto, es importante registrar este valor, ya que es una forma de anticipar su peso en la llegada al otoño. Además, permite hacer un manejo nutricional por separado, en caso de detectar condiciones bajas en algunos vientres. Un valor óptimo rondaría 2,8, pero también puede ser ligeramente inferior (no menos de 2)
